Uno de los secretos para alcanzar las metas de peso y de silueta más rápidamente es alargar los entrenamientos, pero ¿cómo se hace para seguir y seguir, retrasando la aparición del cansancio?
Las siguientes son tres estrategias que te ayudarán a aumentar tu resistencia para que puedas realizar entrenamientos más vigorosos y duraderos, obteniendo mejores resultados y de manera más rápida.
Lento pero seguro
Alarga la duración de tus entrenamientos de manera gradual a lo largo de la semana. Comienza por ejemplo con 40 minutos y ve sumando minutos los días siguientes hasta alcanzar una carrera de una hora de duración. A diferencia de los entrenamientos de alta intensidad, esta estatregia a base de días más suaves y días más duros ayuda a aumentar la resistencia con el tiempo.
Energízate correctamente
No existe nada peor que quedarse sin energía antes de completar el entrenamiento, así antes de comenzar asegúrate de que tienes combustible suficiente. Los alimentos altos en carbohidratos complejos son una gran comida antes del entrenamiento, ya que producen un tipo de energía sostenida cuando los ingerimos al menos dos horas antes de salir a correr. Si vas a salir justo después de comer, la mejor opción es un snack que contenga carbohidratos y proteínas de fácil digestión.
Muestra tu fuerza
Combinar el cardio con el entrenamiento de fuerza es fundamental para correr más tiempo sin agotarse. Esto se debe a que depender únicamente del cardio puede conducir a la ruptura muscular, ya que el cuerpo necesita combustible. Y eso no construye precisamente un cuerpo de corredor de maratón. Así que incluye entre 60 y 90 minutos semanales de entrenamiento de fuerza en tu rutina.