Inscribirse en el gym es una de las mejores decisiones que podemos tomar. Sin embargo, no debemos tomar a la ligera los primeros días de entrenamiento y, mucho menos, tratar de imitar lo que hacen las personas que tienen años de experiencia.
Antes de emprender el camino hacia una vida más saludable y la transformación de nuestro cuerpo, conviene acudir a gimnasios Córdoba que ofrecen asesoramiento profesional especializado, así como evitar los siguientes errores:
Seguir las rutinas de los experimentados
Aunque no existe nada malo en echar un vistazo a las revistas y páginas web que ofrecen entrenamientos dinámicos, resulta contraproducente intentar imitar lo que hacen los profesionales.
En su mayoría, estos entrenamientos son el reflejo de sus capacidades actuales, por lo que los ejercicios son inapropiados para los novatos. Durante el inicio, la clave es elegir rutinas personalizadas e ir avanzando paulatinamente.
Subestimar el calentamiento y comenzar con ejercicios complejos
Los deportistas y atletas profesionales reconocen la importancia de los ejercicios de estiramiento. Sin importar la clase de entrenamiento, el cuerpo debe calentarse de manera adecuada, de lo contrario, incrementamos el riesgo de sufrir lesiones a nivel muscular, en los tendones o ligamentos.
Incluso cuando nada impide comenzar a ejecutar ejercicios de alto impacto, siempre resulta conveniente dar los primeros pasos desde lo básico, antes de pasar a las máquinas avanzadas.
Descuidar la técnica y abusar con el peso
Otro error que puede costar muy caro es ejecutar mal los ejercicios. La regla de oro en los gimnasios es entender que nadie nace sabiendo. Los entrenadores son los indicados para brindar orientación y están dispuestos a ayudar.
La prisa no hará que los resultados lleguen más rápido, solo conduce a descuidar la técnica y con ello, el peligro de dislocar alguna articulación, sufrir desgarros en las fibras musculares, o peor aún, una fractura. El control debe ser pleno tanto en los movimientos, como respecto al entorno.
En los primeros entrenamientos, la peor equivocación radica en someter al cuerpo a cargas que no es capaz de soportar. Más que poner a prueba la resistencia, vale la pena enfocarse en maximizar la intensidad de la rutina.
Forzar las repeticiones y sobreentrenar
Uno de los riesgos potenciales presentes en los gimnasios es el de repetir los movimientos hasta extenuarse. En este punto, sobresale la importancia de elegir entrenamientos personalizados, después de todo, cada persona tiene su propio nivel de tolerancia.
Excederse en las exigencias conduce a la fatiga. Un cuerpo cansado pierde la efectividad de sus mecanismos naturales, por ende, es incapaz de recuperarse y de seguir un proceso de reconstrucción muscular.
El sobreentrenamiento genera un estado de no progresión sobre el organismo, el cual no solo se resiente y experimenta debilitamiento físico, sino desde el punto de vista mental.
Esperar resultados demasiado rápido y perder la motivación
Tanto perder peso como ganar musculatura, son procesos que requieren tiempo, esfuerzo y dedicación. Establecer metas surrealistas únicamente conduce a la frustración.
Asimismo, conviene entender que los cambios varían en función de cada individuo y es necesario combinar el entrenamiento con hábitos saludables. El cuidado de la alimentación e hidratación son dos aspectos elementales, al igual que darle al cuerpo el tiempo de descanso y recuperación adecuado.
No hay nada más equívoco que la idea de asumir que se puede transformar el cuerpo de la noche a la mañana. Hasta el mínimo cambio, requiere disciplina y constancia, por lo que el proceso es gradual. Debemos mantenernos motivados, los pequeños comienzos conducen a grandes resultados, el esfuerzo debe ser diario.
Entrenar solo ciertas zonas del cuerpo
Los entrenadores profesionales enfatizan la importancia del ejercicio integral, en palabras más simples, es necesario entrenar todo el cuerpo con la misma intensidad.
Contrario a lo que muchos piensan, limitar la rutina a ciertas áreas impide el sentido de proporcionalidad tanto del desarrollo de la musculatura, como en la pérdida de peso.