Si te has propuesto adelgazar este otoño, aquí te ofrecemos cuatro trucos relacionados con la alimentación que sin duda te ayudarán a lograr tu objetivo si eres constante y lo combinas con unas cuantas sesiones de ejercicio semanales.
Dejar de consumir alimentos procesados (patatas fritas, cereales azucarados y la mayoría de cosas que están empaquetadas) ayuda a reducir la cantidad de azúcar, sodio y grasas, lo que se traduce en una pérdida de peso que se puede notar a las pocas semanas y que va en aumento con el paso de los meses.
Aumentar la presencia de fruta, verduras y legumbres en la dieta, apartando los alimentos procesados, las frituras y las salsas (mayonesa, salsa de tomate de lata…) llevará también, sin ningún género de duda, a un adelgazamiento. Además, el organismo también se verá beneficiado, ya que este truco eleva los niveles de vitaminas, minerales y fibra que obtenemos de los alimentos.
Reducir el consumo de sal es otra clave a la hora de bajar de peso a través de la dieta. En su lugar, añadiremos a los platos especias, las cuales aportan también mucho sabor si sabemos elegir bien. Bajar la tensión arterial alta y la disminución del riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares son otras ventajas de recortar la sal.
El último truco consiste en no tomar azúcares añadidos, o lo que es lo mismo, no ingerir ningún alimento cuyo dulzor no sea natural. Los yogures de sabores y la bollería han de retirarse de la dieta, lo que no significa que no podamos ingerir yogures o galletas si antes nos aseguramos de que no contienen azúcares añadidos. Asimismo, la fruta es la mayor fuente de azúcar natural que hay.