¿Sabías que los carbohidratos son la principal fuente de energía del cuerpo? De esta manera, no es de extrañar que los expertos los recomienden como parte fundamental de cualquier dieta considerada saludable.
Sin embargo, es importante entender que no todos los carbohidratos son iguales. Los carbohidratos simples son los malos, y por tanto se tiene que limitar su consumo, aunque como veremos hay excepciones. Las siguientes son esta y otras cosas que debes saber acerca de ellos que te ayudarán a mejorar tu dieta:
Carbohidratos simples que hay que limitar
Los refrescos y toda clase de bebidas azucaradas (té helado, bebidas energizantes…), las golosinas, las galletas, los helados y los pasteles y postres contienen carbohidratos simples, razón por la que es muy importante limitar su ingesta por el bien de tu salud. Todos estos productos han sidos asociados con un mayor riesgo de obesidad y diabetes. Sustitúyelos por bebidas naturales y fruta y verdura fresca.
Se pueden tomar ocasionalmente
Los carbohidratos simples no deben ser la fuente principal de hidratos de carbono en tu dieta, pero eso no significa que no se puedan disfrutar de vez en cuando, y más teniendo en cuenta que por lo general, están muy ricos. La clave es hacerlo de manera ocasional y siempre con la moderación como filosofía. Las recompensas semanales son una estrategia que suele ofrecer excelentes resultados.
No todos son perjudiciales
Las frutas y verduras contienen carbohidratos simples de manera natural. Sin embargo, estos grupos alimentarios son drásticamente diferentes de otros que se incluyen en esta categorías de carbohidratos. Esto se debe a que el contenido en fibra de las frutas y verduras cambia la forma en que el cuerpo procesa sus azúcares, ralentizando su digestión. Así que eso les otorga un poco las cualidades que tienen los carbohidratos complejos.