Es posible aplicar diferentes trucos para disfrutar de las verduras sin que perturben la digestión. Hoy vamos a presentar diferentes consejos para evitar que las verduras generen gases.
Cortar el agua de la cocción
Uno de los consejos más comunes suele ser generalmente hervir las verduras para cocinarlas, en un tiempo limitado. Cortar la cocción, simplemente añadiendo agua fría o retirar la cacerola del fuego durante algunos minutos. Se sirven las verduras en el plato, y así se reduce la mitad de los oligosacáridos.
Quitar la piel
Otra razón que provoca normalmente problemas de gas y de indigestión en las verduras se encuentra en su piel, sobre todo si es gruesa. Los guisantes por ejemplo se pueden pelar después de meterlos en agua, incluso aunque sean un poco pesados. Esto resulta más fácil todavía con las judías, por ejemplo. Lo que se puede hacer, es machacarlos para generar una especie de predigestión.
Las hierbas utilizadas contra los gases
Si queréis añadir un toque de especias a las verduras, podéis utilizar hierbas y especias que son buenas para combatir las flatulencias.
Se puede realizar una especie de paquetito con una gasa y colocar en su interior hinojo, comino, anís, perejil, cilantro, y otros. Se debe utilizar durante la cocción para ver cómo los problemas de las flatulencias se reducen. Igualmente se puede beber una infusión con estas plantas después de comer.