¿Sabíais que comer en familia permite mejorar los hábitos alimenticios de los hijos? En efecto, puesto que se ingiere la comida en casa y no en el restaurante, los alimentos consumidos presentan una mejor calidad nutricional. Serán concretamente más ricos en fibras alimenticias, en vitaminas y minerales, por razón de una presencia creciente de verduras y de frutas, comparativamente con las comidas consumidas en el exterior.
Mejores comportamientos alimenticios
Estar en compañía de los más cercanos en el momento de las comidas permite igualmente discutir y conversar manteniendo unas relaciones favorables. Los jóvenes que se sientan a la mesa para comer con sus padres tienen tendencia a desarrollar un sentimiento de confianza hacia ellos, y se ven menos sujetos a desarrollar desarreglos del comportamiento alimenticio, como bulimia o anorexia.
Puesto que la hora de la comida no está consagrada únicamente a engullir el contenido del plato, grandes y pequeños pueden escuchar mejor las señales del hambre y de la saciedad. Esta es la razón de por qué ciertos estudios han puesto en evidencia el hecho de que comer en familia previene igualmente los problemas de sobrepeso.
Tiempo y placer
Dentro del ritmo acelerado de todos los días, se tiene la obligación de pararse y de tomarse cierto tiempo para uno mismo. Estáis trabajando, los niños van al colegio o a la guardería, ¿por qué no aprovechar las comidas como pretexto para relajarse? Es inútil lanzarse en la preparación de comidas demasiado complicadas. Un filete de pescado marinado, arroz de jazmín y una ensalada de tomates con pepino libanés pueden colmar todos los vientres que se acerquen a comer tranquilamente a casa.
Si todavía quieres mejorar más la experiencia, relajación y tiempo de bienestar durante las comidas, es importante fijarnos en las mesas de comedor y comer ne una que nos guste, en la ue estemos cómodos y se integre con la decoración del comedor y el ambiente de la casa.
Comer sigue siendo una necesidad vital, pero sobre todo es un auténtico placer. Los alimentos permiten a los niños explorar sus sentidos, el gusto, el tacto, la vista, y vivir experiencias gustativas que les permiten apreciar una variedad de alimentos cada vez mayor.
Comer en familia sólo aporta grandes ventajas. Basta con consagrar un poco de vuestro tiempo y cambiar la percepción sobre la importancia que se concede a las comidas. Y vosotros, ¿cuáles son los beneficios que constatáis a la hora de comer en familia?