Después del verano, muchas personas se encuentran con que han ganado algunos kilos debido a la vida sedentaria y los excesos alimentarios. ¿Sabías que beber agua de pomelo te puede ayudar a perder peso?
Corta un par de rodajas de pomelo y colócalas en un vaso entre mediano y grande. Después añade agua hasta llenar el vaso. Intenta que las rodajas sean delgadas. Para no malgastar alimentos, envuelve el resto en papel y film y reserva en el frigorífico. También puedes exprimir su zumo directamente en el agua.
Cabe señalar que el agua de pomelo no es un elixir mágico para adelgazar, pero puede ayudar si se incluye dentro de una dieta saludable y se combina con ejercicio. Y es que esta fruta, también conocida como toronja, está considerada como una de las mayores quemagrasa de la naturaleza.
Además, pone en marcha el metabolismo (recordemos que para perder peso, es aconsejable tenerlo a pleno rendimiento), y nos mantiene alejados de los antojos de azúcar al ayudar a reducir el apetito. Si al volver de vacaciones, tu ropa ya no te sienta tan bien cómo antes, esta es una estrategia muy a tener en cuenta.
Le sacaremos el máximo partido a esta bebida natural si la tomamos en lugar de y no además de. No la tomes sólo por la mañana. Hazlo también durante el día. Cambiar tus cafés y refrescos por agua de pomelo te ahorrará un importante número de calorías al cabo del día. Si eres de los que normalmente toma agua, añadirle pomelo te permitirá conseguir un sabor más vibrante a cambio de 0 calorías.