Gran poder antioxidante
Gracias al licopeno el tomate es de color rojo, este componente además es un gran antioxidante que neutraliza los radicales libres, esas sustancias responsables del envejecimiento de la piel y del organismo en general. Puede neutralizar además las enfermedades cardiovasculares y del cáncer.
Además, el licopeno previene la oxidación de los lípidos, por esta razón, disminuye el colesterol y los triglicéridos en sangre, haciendo que las enfermedades del corazón se mantengan alejadas de nosotros. Además de en el tomate, el licopeno se encuentra en las zanahorias, el pomelo, la sandía o el albaricoque.
El más completo es el tomate puesto que contiene hasta un 90% de la cantidad diaria recomendada, el cocinar el tomate hace que el licopeno aflore más y esté más enriquecido.
Otros nutrientes del tomate
El tomate también posee otros complementos y nutrientes muy importantes para nuestra alimentación. Nos aporta vitaminas A, C y K. La acción más importante es la vitamina C para actuar como antioxidante, así como la vitamina K que es la necesaria para que funcione correctamente nuestra coagulación de nuestro cuerpo.
La vitamina A mantiene buenos niveles saludables en nuestro piel, además, es perfecto para que nuestros huesos estén fuertes al igual que nuestro sistema inmune.
El potasio, el magnesio, el calcio o el fósforo son indispensables para que las reacciones metabólicas estén bien controladas y bien mantenidas.
No hay que dejar de lado ninguna fruta o vegetal, en esta ocasión el tomate nos aporta grandes beneficios, tómalo de la forma que más te guste pero consume semanalmente esta verdura tan polifacética.