
Esta es una receta ideada para las personas que están realizando un régimen dietario para adelgazar o de mantenimiento. Al estar preparada especialmente con elementos que poseen un bajo contenido calórico te permitirá saborear una preparación rica y diferente, ideal para los golosos interesados en otras recetas light como budín de pera light.
Este budín está elaborado a base de manzanas, una fruta que aporta fibra y se utiliza en muchas dietas cuyo objetivo es bajar de peso. Eso sí, se recomienda que no te excedas en la cantidad de budín que comes porque echarás a perder el esfuerzo realizado y engordarás.
Ingredientes:
» Agua: 150cm3.
» Manzanas: 6.
» Edulcorante: 2 cucharadas soperas.
» Maicena: 20g.
» Huevos: 1.
» Esencia de vainilla light: 1 cucharadita de té.
» Manteca light: 150g.
» Harina: 200g.
» Polvo de hornear: 1 cucharadita de té.
Preparación:
Primero tendrás que untar la budinera con una mínima cantidad de la manteca light. Luego tendrás que cortar las manzanas en rodajas lo más finas que puedas y colocarlas en la budinera. Toma un recipiente, mezcla en él la maicena, el polvo de hornear y la harina; una vez que estén integrados los 3 elementos tendrás que tamizarlos y luego esparcirlos sobre las manzanas.
En otro recipiente deberás batir el huevo, la esencia de vainilla light y el edulcorante; cuando estén mezclados en forma homogénea deberás agregarle lentamente el agua y luego volcarlo en la budinera. Tendrás que cocinar esta preparación en horno a temperatura baja durante 40 minutos.
Trucos para un budín ligero, húmedo y con sabor

Precalienta el horno a 170-180 ºC y usa un molde acorde al volumen para lograr una cocción pareja. No es imprescindible usar batidora: con una espátula puedes integrar sin sobrebatir para que el budín quede esponjoso.
Para potenciar la humedad, coloca capas finas de manzana entre la mezcla. Tamizar los secos (ya lo haces en la receta) ayuda a que no queden grumos y a una miga más aireada.
Si deseas una corteza delicada sin azúcar, enmanteca el molde y espolvorea con harina o maicena en lugar de azúcar. Una pizca de canela y ralladura de limón realzan el sabor sin sumar calorías.
Vigila el punto con la prueba del palillo: debe salir apenas con migas húmedas. Deja templar 10 minutos en el molde y desmolda para evitar que se humedezca en exceso.
La receta rinde para un molde pequeño; si usas uno grande, duplica o triplica las cantidades manteniendo las proporciones.
Variantes saludables y adaptaciones
Con avena: sustituye 50-100 g de la harina por avena molida o instantánea. Aporta fibra, mejora la saciedad y da un toque rústico. Ajusta con 1-2 cucharadas extra de líquido si la mezcla queda densa.
Harinas: puedes combinar harina común con integral (50/50) para sumar fibra. Para opción sin gluten, usa mezcla apta y verifica que el polvo de hornear sea libre de gluten.
Grasas: si prefieres, cambia parte de la manteca light por aceite neutro o por 60-80 g de yogur natural descremado para aligerar la receta.
Endulzante: mantén el edulcorante apto horno. Ajusta al gusto y al dulzor de tus manzanas.
Especias y extras: canela, vainilla, nuez moscada o ralladura cítrica. Si no sigues una dieta estricta, servir tibio con una cucharada de yogur alto en proteínas o, en versión no light, con crema batida o una bola de helado.
Servicio, conservación y porciones
Sirve tibio o a temperatura ambiente; el reposo realza el sabor a manzana. Para cortes limpios, enfría por completo.
Conserva en recipiente hermético hasta 3 días en la heladera. También puedes congelar en porciones por hasta 2 meses; descongela en la heladera y recaliéntalo unos minutos.
Para control de porciones, corta en rebanadas finas. Acompaña con fruta fresca o una infusión para un desayuno o merienda equilibrada.
Esta versión light de budín de manzana combina ingredientes sencillos con técnicas que mejoran textura y sabor. Con las variantes propuestas podrás adaptarlo a tu objetivo: más fibra con avena, menos grasa con yogur o un toque aromático con especias, manteniendo el espíritu de una receta sabrosa y ligera.
