Kamut uno de los cereales más antiguos

mamut kamut

Este cereal destaca muy por encima del trigo común porque contiene muchos más lípidos, fibras, proteínas, minerales y vitaminas. El kamut, es una clase de trigo el más antiguo de los cereales que podemos encontrar en el mercado y sus propiedades son increíbles.

No es un cereal moderno, se lleva trabajando desde tiempo atrás y aunque ahora esté tomando más importancia en los mercados, sobre todo los ecológicos y tiendas especializadas en comida sana, el kamut lleva con nosotros mucho tiempo.

La producción de productos con harina de kamut está en auge, desde pan de molde, pan normal, palitos de pan con semillas, bizcochos, comida preparada, repostería y un largo etcétera que te deja asombrado.

Propiedades del kamut

Este grano tiene un tamaño más grande que el de su compañero el trigo, puede llegar a triplicarlo y tiene un sabor dulce y agradable parecido al de la mantequilla. Posee una concentración superior de proteínas, lípidos, minerales y vitaminas. Un cereal muy fácil de digerir aunque debemos recalcar que sí que contiene gluten y no es aptos para todos aquellos alérgicos o intolerantes al trigo, es decir, los celíacos.

Se conoce como el trigo egipcio, el de los faraones o Tutankamón, muy rico en hidratos de carbono complejos, proteínas y grasas poliinsaturadas, como el omega 6. Aporta a quien lo consume hierro, calcio, magnesio, fósforo, selenio y zinc. Las vitaminas no se quedan atrás y la vitamina E, muy buen antioxidante junto a las del grupo B, están también en el interior de este súper grano.

Como se puede observar tiene grandes ventajas nutricionales por esta razón, se aconseja su consumo a todas aquellas personas que estén en época de entrenamiento, niños y estudiantes para tener buen alimento y poder desarrollar sus aptitudes físicas y mentales con gran destreza.

Usos del kamut

Como comentábamos anteriormente, el kamut se puede encontrar de diversas formas, entre ellas, destacamos, la harina para elaborar repostería o pan, pastas o sémolas. También se puede consumir el grano entero sin manipularlo, tan sólo cociéndolo como si se tratara del grano de trigo.

Se puede incluir en ensaladas, sopas y postres. Como espesante para cremas y salsas o incluso para los más atrevidos, o los que siguen una vida vegetariana y vegana, pueden hacer deliciosas hamburguesas.

Son increíbles las ventajas de este cereal milenario, la próxima vez que visites tu supermercado no dudes en buscarlo, o sino, en tiendas ecológicas y especializadas de dietética seguro que lo encuentras.


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