El uso del sujetador es una práctica habitual entre las mujeres, ya sea por motivos estéticos, de soporte o comodidad. Sin embargo, llevar un sujetador demasiado ajustado puede derivar en problemas de salud que muchas mujeres desconocen. Desde alteraciones en la circulación, problemas posturales y dolos musculares, hasta afectaciones en la piel y el sistema linfático, es fundamental conocer los riesgos de elegir una talla inadecuada y cómo evitarlos.
Consecuencias de usar un sujetador demasiado apretado en la salud
Compresión del tejido mamario y problemas circulatorios
Un sujetador excesivamente apretado ejerce una gran presión sobre el tejido mamario. Esto puede impedir el flujo sanguíneo adecuado, lo que significa que el pecho no recibe suficiente oxígeno ni nutrientes. Además, la compresión prolongada puede dar lugar a una acumulación de toxinas en el tejido, causando inflamación, dolor e incluso cambios en la textura de la piel.
Interferencia en el drenaje linfático
El sistema linfático cumple una función clave en la eliminación de toxinas del cuerpo. Un sostén demasiado ajustado puede obstruir el flujo linfático, lo que aumenta la posibilidad de inflamaciones y la formación de bultos en los senos. Aunque no hay evidencia científica que relacione esto con el cáncer de mama, sí se ha demostrado que una mala circulación linfática puede afectar la salud mamaria en general.
Dolores posturales y musculares
El uso prolongado de un sujetador muy apretado puede causar trastornos posturales, afectando la espalda, los hombros y el cuello. En mujeres con pechos grandes, esta presión adicional puede derivar en dolores crónicos y alteraciones en la alineación de la columna, lo que a largo plazo puede generar complicaciones musculoesqueléticas.
Irritaciones en la piel y marcas permanentes
El roce constante del sujetador sobre la piel puede provocar irritaciones, rojeces e incluso pequeñas heridas o infecciones. Además, los tirantes demasiado ajustados pueden dejar marcas permanentes en los hombros, afectando la circulación y causando molestias continuas.
Impacto en la respiración y el sistema digestivo
Un sujetador ajustado puede restringir la capacidad pulmonar, dificultando la respiración profunda. Además, en algunos casos, la presión sobre el abdomen puede interferir con el tránsito intestinal, provocando molestias digestivas como reflujo o acidez.
Alteraciones hormonales
Se ha sugerido que la presión constante sobre los senos podría afectar la producción de ciertas hormonas responsables de la regulación del sistema endocrino. Aunque todavía se necesitan más estudios al respecto, es recomendable evitar el uso de ropa interior demasiado ajustada durante largos períodos.
Cómo elegir el sujetador adecuado
Conocer la talla correcta
Para evitar los problemas derivados del uso de un sujetador inadecuado, es imprescindible conocer la talla exacta. Para ello, se deben tomar dos medidas clave:
- Contorno bajo el busto: Mide justo debajo del pecho para determinar la talla de banda.
- Contorno sobre el busto: Mide la parte más voluminosa del pecho para calcular la copa.
Elegir materiales transpirables y cómodos
El tipo de tejido también juega un papel fundamental en la comodidad del sujetador. Optar por materiales transpirables como el algodón o la microfibra ayuda a reducir las irritaciones cutáneas. Evita sujetadores con demasiados materiales sintéticos o elementos rígidos que puedan causar molestias.
Evitar el uso prolongado
Siempre que sea posible, se recomienda retirar el sujetador al llegar a casa o al dormir para permitir que la piel respire y mejorar la circulación. En el caso de deportes, es importante utilizar un sujetador adecuado para la actividad física que brinde el soporte necesario sin ejercer una presión excesiva.
Beneficios de no usar sujetador en ciertos momentos
Algunas investigaciones han indicado que prescindir del sujetador en determinadas circunstancias puede traer beneficios como una mejor circulación sanguínea y menor riesgo de infecciones cutáneas. Además, el uso reducido del sujetador puede contribuir a fortalecer los ligamentos naturales de los senos y prevenir su caída.
Usar un sujetador con la talla y el ajuste adecuado es clave para la salud mamaria y el bienestar general. Un sujetador demasiado apretado puede causar complicaciones en la circulación, la postura, la respiración y la piel. Tomar medidas precisas, optar por buenos materiales y evitar su uso prolongado son hábitos esenciales para evitar estos problemas. La comodidad y la salud deben ser prioritarias al momento de elegir la ropa interior adecuada.