Dado que el estrés es el responsable de la mayoría de casos de insomnio, cuando no se puede dormir la estrategia más inteligente es intentar tranquilizarse. Desde luego es la acción que tiene más sentido.
Pero lograr un estado de calma que facilite el sueño no es tan sencillo como pulsar un botón. Cuando el nerviosismo ha sobrepasado la línea, hay trabajárselo un poco más. El siguiente ejercicio de respiración (llamado 4-7-8) actúa como un tranquilizante natural sobre el sistema nervioso de las personas cuando están ansiosas y no pueden conciliar el sueño.
- Coloca la punta de la lengua contra la cresta de tejido que hay justo detrás de los dientes incisivos centrales y mantela ahí durante todo el ejercicio.
- Exhala por completo a través de la boca, haciendo el típico sonido de helicóptero.
- Cierra la boca e inhala tranquilamente por la nariz mientras cuentas mentalmente hasta cuatro.
- Aguanta la respiración mientras cuentas mentalmente hasta siete.
- Exhala por completo a través de la boca mientras cuentas mentalmente hasta ocho. Repite el sonido del helicóptero.
- Hasta aquí el primer ciclo. Ahora vuelve a inhalar y repite todo el proceso tres veces más hasta un total de cuatro ciclos.
Se ha demostrado que la meditación es una de las prácticas con más beneficios desestrantes, y este truco te ayudará a cosechar algunos de ellos de manera fácil y rápida.
Nota: Memorizar este ejercicio no sólo te vendrá genial cuando estés en la cama y no puedas dormir, sino que también te ayudará a lidiar con situaciones estresantes durante el tiempo diurno, como un mal día en el trabajo o una discusión con la pareja, sintiéndote más relajado de inmediato.