El oído es un órgano complejo que está formado por tres regiones principales, en primer lugar el oído externo que protege el tímpano de los daños directos, en segundo el oído medio, que es la cavidad que alhoja el aire y se conecta a la parte posterior de la nariz a través de la trompa de Eustaquio, que se abre cuando tragamos o bostezamos y la última región son los pequeños huesos que transmiten las vibraciones desde el tímpano hasta el oído interno o cóclea.
La salud de oído es muy importante para liberarnos del dolor y las infecciones, pero además se deben evitar los daños a la audiencia, ya que desafortunadamente muchas personas no saben cómo cuidar de sus oídos adecuadamente, por no tener los oídos limpios o el exceso de uso de los bastoncillos de algodón para limpiarlos, lo cual se traduce en infecciones y hasta daños permanentes, cuando se producen este tipo de situaciones.
Aquí les brindamos algunos consejos saludables para mantener un oído sano, a saber:
1. El oído externo está diseñado para que sea un lugar fácil de limpiar, pero un bastoncillo de algodón no funciona para limpiarlo correctamente ya que empuja la cera del oído hacia su interior, por ello como consejo la mejor manera de limpiarlos es usar agua y jabón, ya que el oído mismo hará que la suciedad desaparezca, además se puede usar aceite de oliva para suavizar la cera del oído.
2. No se debe preocupar por los cambios de color de la cera de los oídos, por que la textura y el color puede ser diferente para cada persona, así como puede ser blanda o dura, de color naranja o marrón. Sin embargo, si es verde y gruesa (pus), es un signo de infección del oído que debe ser tratada inmediatamente.
3. Nunca rasque la oreja cuando le pica, ya que la comezón puede ser causada por el eccema o psoriasis, por lo cual se debe asistir inmediatamente al médico para recibir tratamiento.
4. Cada tipo de infección en el oído requiere tratamiento de un especialista y hay dos tipos de infección localizable, una en el oído externo y otra en el oído medio. En el oído externo por lo general se produce por suciedad y se trata con antibióticos en gotas. Mientras tanto que para el oído medio es mucho más delicado ya que puede tener un impacto negativo en el tímpano, ya que puede llegar a romperse, por lo cual los pacientes deben recibir comprimidos de antibióticos recetados, además de utilizar gotas.
Imagen: Flickr