Si has intentado convertirte en un runner pero no has tenido éxito, antes de rendirte considera poner en práctica este método, indicado para comenzar a hacer running cuando nunca has hecho running.
Especialmente recomendado para las personas mayores de 50 años que nunca han recorrido grandes distancias corriendo, pero que desean ponerse en forma con la ayuda de este deporte de creciente popularidad.
El método es sencillo: correr, caminar y correr a intervalos cortos y temporizados. La duración máxima recomendada de los intervalos es de 30 segundos (0:30 corriendo / 0:30 caminando) y la mínima de 15 segundos (0:15 corriendo /0:15 caminado).
Comienza por una distancia que te resulte cómoda e intenta ir aumentándola a medida que transcurren las semanas. El secreto es utilizar el método de intervalos durante toda la distancia: correr, caminar, correr… correr, caminar, correr… Esto ofrece al cuerpo la posibilidad de aumentar su resistencia de manera suave, hasta alcanzar el nivel necesario para hacer running durante kilómetros.
Si te lo propones, al cabo de unos meses podrás completar carreras de hasta 10 kilómetros sólo corriendo. Pero no sólo eso. El método de intervalos permite controlar mejor la fatiga y bloquear los pensamientos negativos que pueden arruinar el entrenamiento, aliviar el estrés y aumentar la agudeza mental.
Asimismo, ayuda a perder peso a cambio de un riesgo de lesiones bastante bajo. En definitiva, tanto la salud como la forma física experimentan un giro positivo, justo lo que necesitan muchas personas mayores de 50 años con un tipo de vida sedentario.