Para manejar la artritis reumatoide, se requiere algo más que medicación. Las personas con esta enfermedad tienen que asegurarse de descansar bien por las noches, mantenerse activos y conservar un peso saludable para conseguir una mejor calidad de vida.
Aliviar la fatiga causada por la artritis reumatoide no sólo pasa por mejorar la calidad del sueño (pues el cansancio puede aparecer incluso cuando se duerme muy bien, dado que es uno de los síntomas de esta enfermedad), sino también por mantenerse hidratados y establecer prioridades en lo referente a las tareas para no agotar los depósitos de energía. Esto implica decir «no» a algunas cosas, sobre todo en épocas donde las fuerzas no dan para mucho.
Practicar ejercicio con regularidad es muy importante para las personas con artritis reumatoide, pues la inactividad suele agravar sus síntomas. El yoga es una excelente opción, aunque cualquier actividad física que escojas, te será de gran ayuda si la practicas regularmente y vas aumentando la duración y la intensidad de manera gradual.
A la hora de conservar un peso saludable cuando se padece artritis, no existe ninguna dieta específica, sino únicamente buenos hábitos nutritivos. Los alimentos procesados, el azúcar blanco y las harinas refinadas deben estar bien lejos de tu mesa, mientras que la fruta, la verdura y los granos enteros se consideran como beneficiosos.
Participar en grupos de apoyo, reducir la exposición a situaciones estresantes y encontrar nuevas formas de aliviar el dolor que no sean analgésicos (como el uso de rodilleras, coderas, etc.) son otros de los complementos, que unidos a la medicación prescrita por el médico, forman un eficaz plan global contra los síntomas de la AR.