El aguacate es uno de los alimentos más beneficiosos que se pueden encontrar en el mercado, sobre todo a la hora de perder peso. Lo que sucede es que en el terreno de los snacks de media mañana o tarde no puede competir por sí solo contra la manzana o el yogur debido a que es más difícil comérselo y su sabor no es tan agradable.
Por suerte, existen maneras de disfrutar de todas las ventajas del aguacate durante el almuerzo o la merienda. Una de las más deliciosas y sorprendentes es combinarlo con pipas de girasol. En esta nota de explicamos cómo llevar a cabo esta sencilla receta para aliviar de manera saludable los antojos.
Toma un aguacate y córtalo por la mitad. Quédate con el lado sin hueso y guarda el otro para más tarde (el hueso ayuda a que la carne se mantenga verde durante más tiempo). A continuación, procede a espolvorear una cucharada de pipas de girasol en el centro (que sean peladas y saladas), donde antes estaba el hueso. Y listo, ahora usa una cuchara para comértelo. Ni siquiera se necesita plato, pues la piel del aguacate nos permite agarrarlo sin ensuciarnos las manos.
Dado que el aguacate está repleto de grasas saludables y fibra, este snack es ideal para perder peso. Y es que la fibra sacia el apetito, haciéndote sentir lleno durante horas. Por su parte, las pipas de girasol aportan proteínas, así como crujiente y salinidad. En combinación, otro efecto beneficioso es el levantamiento del ánimo. Nos pone arriba en un par de minutos, listos para afrontar el resto de la jornada laboral.