Siempre se ha visto que cuando uno deja de fumar coge un par de kilos sin desearlo. Sin embargo, es mucho más recomendable estar un poco más gordito o gordita y no tener el mal hábito de fumar.
Muchas de las personas fumadoras ponen de excusa el aumento de peso para no dejar de fumar, quieren verse antes delgados que sanos. Aunque en realidad, no está del todo claro que porque uno deje de fumar tenga por qué engordar.
¿Engorda? ¿Mito o realidad?
El dejar de fumar te prevendrá de posibles enfermedades como es el cáncer de pulmón, de lengua, garganta o piel. Además de que conseguirás ahorrar un dinero si se deja de comprar.
En reglas generales todos los ex-fumadores cuando dejaron de fumar sí que cogieron un par de kilos de más. Es algo normal y pasajero. La razón es que la sustancia aditiva, la nicotina, ayuda a quemar calorías, fumando 20 cigarrillos se pueden llegar a quemar hasta 250 kcal.
Por otro lado, el tabaco da sensación de saciedad y hace que perdamos el apetito, por ello, cuando dejamos de fumar tenemos el efecto contrario, siempre estamos ansiosos y con gula. De ahí que se pueda engordar de 4 a 8 kilos durante las primeras semanas. En ocasiones, este aumento provoca un efecto nunca deseado, al verse «tan mal» físicamente, deciden volver a fumar.
Este aumento de peso no es eterno, transcurridos 6 meses tu cuerpo se acostumbrará y empezarás a sentirte fenomenal y sin ganas de fumar ni tan sólo uno.
Consejos a seguir para no engordar
- Consumir alimentos ricos en fibra: estos tienen el poder de ser muy saciantes y no contienen a penas calorías.
- Beber mucha agua: lo ideal es consumir de 2 a 3 litros diarios. De esta manera conseguirás saciar el ansia de fumar y el apetito. Si el agua te cansa te recomendamos jugos naturales sin azúcar o licuados verdes.
- Hacer ejercicio a diario: no importa si sólo es caminar, pero por lo menos hay que mantenerse activo en cuerpo y mente para no tentarnos y comer sin cesar. Con el ejercicio se queman endorfinas, una sustancia encargada de sentirnos mejor cono nosotros mismos.
En fin, no hay nada que perder por dejar de fumar, los kilos que vienen se irán con un poco de fuerza de voluntad y constancia. Como decíamos es preferible coger 4 kilos que seguir fumando diariamente una cajetilla de tabaco o más.