El apio está compuesto en un 94% de agua. Se trata por lo tanto de un alimento perfecto para integrarlo en la alimentación, porque tiene pocas calorías y favorece la eliminación de toxinas.
El apio es un alimento diurético compuesto de sustancias que ayudan a eliminar los líquidos almacenados en el cuerpo. Estas propiedades se encuentran en el tallo, las semillas y las hojas del apio.
El apio contiene muy pocas calorías y por eso se puede incluir en el régimen sin tener que preocuparse constantemente de las calorías que aporta, porque 100 gramos de apio representan 16 calorías.
El apio presenta un efecto saciante puesto que es rico en fibras. Por consiguiente, aumenta la sensación de saciedad y ayuda a regular el tránsito intestinal. El apio es una verdura depurativa, ya que la gran cantidad de fibras que contiene ayuda a limpiar el cuerpo y a eliminar las toxinas que se acumulan en el organismo.
La sopa de apio
Una forma ideal de adelgazar con el apio es utilizarlo en sopas y en caldos de verdura. Se puede beber al día tanto como se quiera. Si se bebe el caldo antes de cada comida, ayuda al cuerpo a sentirse más saciado, y por consiguiente, se evita comer demasiado. Esta sopa ayuda a perder peso por razón de sus propiedades características tal y como hemos explicado anteriormente.
La sopa de apio se prepara con los siguientes ingredientes:
- 6 ramas de apio,
- una cucharada sopera de aceite de oliva,
- una cebolla,
- un poco de pimienta,
- una cucharada de café de fécula de maíz,
- un litro de agua con un cúbito de caldo concentrado,
- una hoja de laurel.
El agua se lleva a ebullición y se ponen los ingredientes en una cacerola a fuego lento. De esta forma se obtiene un caldo depurativo que ayuda a quemar grasas y a disfrutar de todos los beneficios del apio.