A pesar de que muchas personas no conceden demasiada importancia a los productos para los ojos, utilizar exclusivamente este tipo de productos es esencial para prevenir un contagio de conjuntivitis y cualquier enfermedad ocular. Las gotas para los ojos y el resto de medicamentos para los ojos no se deben compartir, si se desea reducir los riesgos de conjuntivitis.
Las personas que llevan lentillas suelen tener más posibilidades de contraer una conjuntivitis, porque a veces manipulan de forma errónea estas lentes. Si se usan lentillas de contacto nunca se deben compartir, al igual que las gotas, o estuche para las lentillas. Siempre hay que lavar bien las lentillas antes de utilizarlas, de forma que se reduzcan al máximo las posibilidades de que las bacterias entren en contacto con los ojos.
Para prevenir el contagio de la conjuntivitis, es importante tener las manos limpias antes de tocar los ojos. Las lentillas se deben colocar antes de maquillarse, y poner algunas gotas de agua en los ojos. Después de haberse tocado los ojos, se aconseja volver a lavarse las manos.
Si os maquilláis los ojos, no debéis compartir los productos que os aplicáis. La sombra de ojos, la máscara, y el eyeliner se deben reservar para un uso personal, en caso contrario, estos productos pueden convertirse en fuentes de infección de conjuntivitis de las más corrientes.
Si se comparte habitación con otra persona afectada por conjuntivitis, y que se quiere evitar la infección, es importante no compartir con esa persona ropa o toallas, puesto que los virus y las bacterias responsables de esta enfermedad tienen tendencia a propagarse fácilmente a través de este tipo de textil.
La conjuntivitis viral o bacteriana no se transmite únicamente por el simple contacto visual con otra persona o estando cerca de ella. Tampoco se corre riesgo alguno si se vive en el mismo espacio que una persona afectada por conjuntivitis, siempre que los ojos de estas personas tomen las precauciones necesarias.