El levantamiento de peso debe ser parte fundamental de una rutina de entrenamiento, aunque los falsos mitos que circulan por ahí hacen que a menudo las mujeres tengan ciertas reticencias a ponerse con las pesas.
A continuación los desmontamos para animarte a incluir el entrenamiento de fuerza en tu rutina. Las ventajas de hacerlo son muchas, tanto estéticas como en lo referente a la salud general.
El levantamiento de peso puede ayudarte a conseguir distintos objetivos, y no todos están relacionados con competiciones de halterofilia. Por supuesto que puede llevarte por ese camino, repleto de mujeres extraordinarias, si así lo deseas. Sin embargo, también se puede practicar con la única intención de mantenerse en forma.
A menudo, las mujeres descartan este tipo de ejercicio por miedo a agrandar el tamaño de su cuerpo. Sin embargo, tú decides qué resultados deseas. Tu entrenador te guiará para que el levantamiento de peso te ayude sólo a definir tus músculos, sin ensancharlos. ¿Quién no quiere unos brazos, glúteos y piernas más definidos? Pues las pesas son la única forma de conseguirlo.
Lavantar peso no sólo afecta al tejido muscular, sino que también representa un impulso para el metabolismo. Esto ayuda a deshacerse de más calorías y, por lo tanto, de las acumulaciones de grasa. Combinar el entrenamiento cardiovascular con el de fuerza es la mejor manera de perder peso y que todas las partes del cuerpo conserven una forma atractiva.