Los propósitos de Año Nuevo no deben hacerte sentir abrumado. Uno de los secretos para mejorar nuestra salud es marcarse metas realistas, que seamos capaces de mantener en el tiempo.
Las siguientes ideas van en esa línea. Se trata de cosas que no representan mucho esfuerzo, pero que, al cabo de un tiempo, te harán sentir más en forma y feliz. No dudes en añadir a la lista cosas similares que te veas capaz de hacer todos los días del año.
Trata de comer por lo menos tres alimentos de colores vivos en cada comida. Los tonos vibrantes significan que son ricos en vitaminas y antioxidantes.
Haz 10 flexiones todos los días. Puede ser en cualquier momento: a primera hora de la mañana o mientras esperas que se cocine tu cena.
Sal a la calle durante al menos 10 minutos al día. Caminar te ayudará a quemar calorías, mientras que el aire libre y el sol pueden mejorar mucho tu estado de ánimo.
Alarga tu entrenamiento cinco minutos. Puede que parezca una cantidad insignificante de tiempo, pero unos minutos más corriendo o pedaleando suponen entre 30 y 50 calorías extra quemadas.
Cambia los snacks ricos en carbohidratos por bocados altos en proteína y fibra (como legumbres y verduras), los cuales te ayudarán a saciar el hambre por más tiempo.
Recorta el consumo de azúcar una vez al día. Escoge una comida y sáltate todo lo que lleve azúcar blanco. Hazlo todos los días para desengancharte del azúcar y ahorrar una cantidad estratosférica de calorías al cabo de sólo unos meses.
Duerme ocho horas todos los días de la semana. Aparta los dispositivos electrónicos y lee un libro, teje o practica algo de yoga para relajarte. El descanso es uno de los pilares de la salud.